OPINIÓN
Brahim Dih Saleh/ECS

El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez (i), junto al presidente francés, Emmanuel Macron (d) - EFE
Tanto en la política, como en la magia nada es casual, y muchas veces lo real es lo que no se ve...Para ponernos en contexto miramos un poco por el retrovisor de los hechos y nos trasladamos a febrero del 2019. Hacía frío en Múnich, y la ministra gala Florence Parly se disponía a entrar en un seminario sobre el Sahel y sin venir a cuento, declaró: "El problema del Sáhara Occidental se resolverá antes de que finalice el año 2020, y no se excederá más allá". Pues no "querida", y muy en contra de tus pronósticos, la cuestión saharaui, la resolverán los saharauis, a su modo, y manera.
Como ya nos tienen habituados, semanas atrás hubo algún que otro "rifirrafe" al estilo de pequeños "affaires" entre El Othmani, y Robles por una parte, y González Laya, y Bourita por otra, pero nada de importancia, cosas sin trasfondo alguno y que suelen pasar en las mejores familias máxime cuando rinden cuentas al mismo padre (Francia)...En esto interviene el inquilino del Elíseo, llama al orden, y da un golpe de autoridad sobre la mesa y pide que rebajen el tono ya que se ha formado mucho "guirigay", entonces
Sánchez viaja a París, y es agasajado con un almuerzo presidencial. En el menú había como entrantes: Ensalada marroquí con macarrones macronianos. De plato prinicipal hubo: La causa saharauí horneada a fuego lento.
Para el ilustre huésped de bebida tenemos: que las aguas vuelvan a su cauce, y que no haya más ruido. Como postre han servido: Tirón de orejas en Almíbar, con un toque de atención amargo. Sánchez el "reprendido" vuelve a casa, y anuncia entre otras prebendas lo siguiente: La construcción del primer buque de guerra para Marruecos (Astilleros de San Fernando de Cádiz).
Dota a Marruecos con 10,6 millones de euros en material de vigilancia para "reforzar las fronteras".
Por otra parte; los cocineros políticos del Elíseo se han enfurecido, y de que manera! Todo pasó a raíz de ciertos "cameos" que hubo semanas atrás entre Argelia, y Mauritania por lo que se han visto obligados a "encender" los fogones otra vez, yen esta ocasión es para prepararle una cena de gala al presidente de la hermana Mauritania; algo al que hemos asistido esta misma semana, y como sobremesa no podía faltar el plato estrella: La causa saharauí horneada a fuego lento, y condimentada con pimienta, y comino de la conjura...Desde aquí le decimos al anfitrión de la Velada que tenga cuidado, porque tanto aderezo suele provocar reacción urticaria, y hemorroides trombosadas, máxime cuando la tradición culinaria saharaui es alérgica a los sátrapas de adobo.
A modo de conclusión cabe recordar que muchos de los problemas a los que asistimos hoy, y que acechan a Europa con respecto a África, son debidos a las nefastas políticas de Francia en estos países...Para ser un poco más explícito: Yo privatizo las ganancias, y socializo las pérdidas o sea; Francia se apropia de los recursos de África, pero no se hace responsable del los problemas que derivan de ello (La pobreza, y la inmigración, etc...), que dichos "embolados" los resuelva, y acoja toda Europa en su conjunto.
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