> Hoy día, hay multitud de mujeres saharauis cualificadas y preparadas para ocupar todos los cargos políticos.
Por Násara Iahdih Said
OPINIÓN
Madrid, 18 Abril 19 –(ECS). La participación en la política de la mujer saharaui aún sigue sin ser cristalizada. Siguen sin establecer un referente de poder en la política. Siguen vigentes multitud de techos de cristal para la mujer saharaui a la hora de acceder al poder político. Siguen siendo un sujeto pasivo en las esferas políticas, incluso, en la mayoría de los casos, actúan como sujetos de adorno.
Debe haber una cuota de género para hacer posible y efectiva la participación de las mujeres en los asuntos políticos que acarrean la situación geopolítica de nuestra causa y para tener mayor potestad legislativa y de mandato sobre las normas que regirán nuestra sociedad.
Hoy día, hay multitud de mujeres saharauis cualificadas y preparadas para ocupar todos los cargos políticos. Establecer una cuota de género debe ser una medida urgente, pues la mitad de la población saharaui, no está proporcionalmente representada. Se debe garantizar el acceso a los espacios de poder a las mujeres saharauis. Por supuesto, es importante que dichas mujeres que ocupen espacios de poder tengan una conciencia feminista, es la única manera para garantizar los intereses de todas las mujeres.
Si las mujeres que ocupan cargos políticos no tienen esa conciencia necesaria para proteger los intereses de las mujeres saharauis basándose en las teorías del feminismo y en los derechos humanos, veremos nuestros derechos atropellados y vulnerados y seguiríamos siendo el “segundo sexo”. Pues no necesariamente ser mujer y acceder al poder, es sinónimo de garantizar los intereses del género al que pertenece, hace falta además, tener una importante conciencia y convicciones feministas.
La igualdad se consigue trabajándola y luchando por conquistarla. La igualdad se mantiene trabajando en ella y teniendo conciencia de su importancia. Si las mujeres con convicciones feministas llegan al poder, son las más capacitadas para trabajar y garantizar la igualdad entre hombres y mujeres y minorías étnicas. Además, propiciarán una pedagogía solidaria entre las mujeres saharauis, un hecho que en la actualidad es inexistente.
El feminismo, es uno de los pocos movimientos de liberación que ha trabajado basándose en fundamentos y en una buena argumentación, nunca ha derramado sangre en el bando contrario. Es por ello, la necesidad de implantarlo a la par de nuestra justa lucha; la liberación de los territorios saharauis. Y de ahí, la importancia de que quienes ocupen cargos políticos o espacios de poder, tengan una conciencia feminista. Cuando hablo de mujeres saharauis, hablo de todo el amplio abanico que compone la mujer saharaui, es decir, las que forman parte de minorías étnicas y la hegemónica. Dentro de éstas, debe ser visible la diversidad que existe entre nosotras.
Por Násara Iahdih Said
OPINIÓN
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Nasra Mah Iahdih ECS |
Madrid, 18 Abril 19 –(ECS). La participación en la política de la mujer saharaui aún sigue sin ser cristalizada. Siguen sin establecer un referente de poder en la política. Siguen vigentes multitud de techos de cristal para la mujer saharaui a la hora de acceder al poder político. Siguen siendo un sujeto pasivo en las esferas políticas, incluso, en la mayoría de los casos, actúan como sujetos de adorno.
Debe haber una cuota de género para hacer posible y efectiva la participación de las mujeres en los asuntos políticos que acarrean la situación geopolítica de nuestra causa y para tener mayor potestad legislativa y de mandato sobre las normas que regirán nuestra sociedad.
Hoy día, hay multitud de mujeres saharauis cualificadas y preparadas para ocupar todos los cargos políticos. Establecer una cuota de género debe ser una medida urgente, pues la mitad de la población saharaui, no está proporcionalmente representada. Se debe garantizar el acceso a los espacios de poder a las mujeres saharauis. Por supuesto, es importante que dichas mujeres que ocupen espacios de poder tengan una conciencia feminista, es la única manera para garantizar los intereses de todas las mujeres.
Si las mujeres que ocupan cargos políticos no tienen esa conciencia necesaria para proteger los intereses de las mujeres saharauis basándose en las teorías del feminismo y en los derechos humanos, veremos nuestros derechos atropellados y vulnerados y seguiríamos siendo el “segundo sexo”. Pues no necesariamente ser mujer y acceder al poder, es sinónimo de garantizar los intereses del género al que pertenece, hace falta además, tener una importante conciencia y convicciones feministas.
La igualdad se consigue trabajándola y luchando por conquistarla. La igualdad se mantiene trabajando en ella y teniendo conciencia de su importancia. Si las mujeres con convicciones feministas llegan al poder, son las más capacitadas para trabajar y garantizar la igualdad entre hombres y mujeres y minorías étnicas. Además, propiciarán una pedagogía solidaria entre las mujeres saharauis, un hecho que en la actualidad es inexistente.
El feminismo, es uno de los pocos movimientos de liberación que ha trabajado basándose en fundamentos y en una buena argumentación, nunca ha derramado sangre en el bando contrario. Es por ello, la necesidad de implantarlo a la par de nuestra justa lucha; la liberación de los territorios saharauis. Y de ahí, la importancia de que quienes ocupen cargos políticos o espacios de poder, tengan una conciencia feminista. Cuando hablo de mujeres saharauis, hablo de todo el amplio abanico que compone la mujer saharaui, es decir, las que forman parte de minorías étnicas y la hegemónica. Dentro de éstas, debe ser visible la diversidad que existe entre nosotras.